Entrevista a Aida Sánchez

Estudiante de Arquitectura en la UC de Barcelona, está en su último año. Hace poco visitó el instituto y Antonio Escarpa y Lola Lacambra aprovecharon su presencia para que les hablara de la universidad a la marinería que cursa 1º y 2º de Dibujo Técnico de Bachillerato. Les contó que trabajaba más de doce horas diarias. Si queréis haceros una idea de en qué mete tantas horas, clicad en este enlace y veréis algunos de sus trabajos.

¿Qué mejores recuerdos tienes del insti?

Los viajes de estudios, el teatro y las jornadas culturales que se empezaron y acabaron justo en la época que estuve yo allí.

¿Cuáles fueron tus tres mejores profes y por qué, qué cualidades tenían?

Mi profe preferida siempre ha sido Lola, a la que todavía paso a ver cuando me es posible, supongo que sus peculiares formas de dar las clases me llamaron la atención lo suficiente como para prestar atención también cuando explicaba, y con peculiares me refiero, al lanzamiento de tiza, a descalzarse en clase o hacer los cabezudos para la obra de teatro que hicimos, los cuales, por cierto, eran casi más grandes que nosotros y teníamos que llevar con arnés!

Otros profes, puesssss, Carmen Fanlo, Nieves Portas... el departamento de lengua en general siempre ha estado bien estructurado.

Y luego Nacho, el de Educación Física, que hacía entretenidas las clases a la vez que educativas, al contrario que otros de la misma asignatura...

¿Qué defectos tenían los peores?

Del departamento de Educación Física, recuerdo que una profesora no se logró aprender el nombre de ningún alumno en todo el curso, salvando claro está, el de dos personas, hijos de otros profes.
Luego, algunos profesores del departamento de Matemáticas y Física, faltos de recursos para explicarnos, nos motivaban entre gritos e insultos.
Y por último, y en esto espero que algún día (cercano) cambien las cosas, espero que en las clases de inglés, alguna vez, se consiga aprender inglés.

¿Cuáles fueron las anécdotas más surrealistas?

No sé muy bien cual escoger, de las que se acumulan sobretodo son de las horas extra que echábamos en el instituto por las tardes, preparando las jornadas, en las que teníamos que llevar un vehículo gigante hecho de cartón, o una madame Curie gigante casi monstruosa, decorar las clases, como la vez que nos tocó Polonia y tuvimos la tenebrosa idea de decorar la clase como si fuese un campo de concentración, que nos quedó demasiado bien, y luego daba mal rollo dar las clases allí

Las obras de teatro siempre fueron geniales, " La flauta mágica" con Lola Lacambra o "La casa de Bernarda Alba" con Concha Tovar
Y por último creo que siempre recordaré una manifestación que hicimos contra la guerra todos sentados en el patio, formando el símbolo de la paz, algunos profesores estaban en contra porque se hacía en horario de clase y estaban seguros que cuando llegase el recreo nos levantaríamos y nos iríamos, pero les demostramos que no era así.

¿Qué hacéis y cómo os va fuera de aquí? ¿Os sentís bien preparados o estafados?

Estudiar, estudiar y estudiar, me va bien supongo, la universidad puede ser como tú quieras que sea (salvo si pretendes sacar las asignaturas por curso) entonces toca echarlo todo.

Siento que el instituto te prepara, pero no para lo que vas a estudiar luego, sino para otras cosas, no sabría decir el qué.

Estafada, sólo en Inglés, es muy triste que siendo que damos inglés en colegio e instituto un montón de años, si realmente quieres aprender tienes que apuntarte a una academia o clases o algo así, ah! y eso de que es muy últil, bla bla bla, es completamente cierto.

Un beso y hasta otra.

Comentario de Aida (15.03.10): (...) estuve leyendo el blog y mi entrevista, y pone que trabajo 12 horas!!! y de verdad que no es así, os prometo que también salgo a tomar algo y hago deporte. ¡Que estoy 12 horas en el ordenador...!, Eso solo pasa en entregas de proyectos, que entonces sí, 12 y 18 también, pero el resto del tiempo soy casí hasta normal :)